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El estreñimiento en la infancia

El estreñimiento en los niños es un problema común, pero no debemos pasar por alto el hecho de que la salud del intestino es indispensable para mantener las defensas y un crecimiento saludable del organismo.

Generar hábitos correctos de alimentación en la infancia, es trabajo de los adultos; crear un ambiente en el que el consumo de fibras sea normal, así como el consumo de agua más que el de otros líquidos. Cuando un niño tiene deposiciones poco frecuentes, duras y secas o siente molestias al ir de cuerpo podemos decir que se encuentra estreñido.

Algunos factores que contribuyen con el estreñimiento

-En los primeros años de vida , el estreñimiento puede aparecer: en los momentos de cambios en la alimentación; en el paso de la lactancia a leches de fórmula o a la alimentación complementaria, o a la de la mesa familiar. Estas son etapas en las cuales debemos estar pendientes para intervenir a tiempo.

-Entre los 2 y 4 años , la etapa de control de esfínteres y abandono del pañal es otro momento de alerta para los padres, ya que muchos niños retienen la materia fecal por esperar el pañal o llegar a la casa, lo que puede causar estreñimiento. Algunos niños necesitan mayor acompañamiento y tiempo para ir adecuándose a los cambios.

-Cambios en la rutina, como viajes, mudanzas, temas familiares como separación de los padres o el hecho de iniciar el colegio.

-Algunos medicamentos, como los antidepresivos, generan constipación. O postratamientos con antibióticos que generaron diarreas.

-Antecedentes familiares de estreñimiento, los niños con familiares pueden compartir factores genéticos que los vuelven más propensos.

-La falta de fibras en la alimentación, poco consumo de frutas y verduras, cereales integrales o semillas y poca cantidad de agua. Exceso de lácteos e hidratos y panificados blancos o masas.

Es poco frecuente que se dé alguna malformación anatómica o problema del sistema digestivo o metabólico.

Las complicaciones pueden ser dolorosas como:

-Fístulas.

-Fisuras anales.

-Prolapso rectal o encopresis (retención de heces en el colon y recto, que provoca la salida de líquidos fecales).

Cómo podemos prevenir el estreñimiento

-Ofrecer a los niños alimentos ricos en fibras: trozos de frutas en todo momento, desayuno, media mañana o merienda, vegetales en almuerzo y cena, legumbres, semillas, panificados integrales. Las fibras ayudan a formar heces blandas y voluminosas, debemos incorporarlas de a poco para evitar gases y distención.

-Fomentar el consumo de agua y actividad física es indispensable, en el caso de los chicos más pequeños, juegos al aire libre, que entren en contacto con la naturaleza, que no se queden quietos mucho tiempo; esto ayuda a la función intestinal.

-Formar el hábito de ir al baño, en un mismo horario habitual al que suele ir o después de las comidas, conversar sobre la importancia de ir al baño si siente ganas, no retener la materia fecal. Tener en cuenta la posición correcta al sentarse en el water, buscar un banquito que ayude a colocar las piernas. Ser paciente y comprensivo, no retar, estimular positivamente, con cantos, calcomanías, aplausos al momento de ir al baño.

-En el caso de ñinos que rechazan las frutas y verduras, utilizar la imaginación en la forma en la que se preparan los platos, o iniciar con vegetales y frutas cocidas en preparaciones como tartas, tortas, panqueques, soufflés o puré.

Recordar que los niños viven del ejemplo; es necesario que en casa todos lleven una vida saludable o compartan hábitos que los estimulen, como comer frutas de postre todos juntos, conversar en la mesa y estimular el consumo de vegetales.

En el caso de no conseguir avances, consultar con un nutricionista para evaluar las opciones y las recomendaciones a seguir.