
Nutrición femenina: “Potencie cada fase de su ciclo”
1 Noviembre 2023
Hasta hace algunos años (y probablemente hasta el día de hoy) ha sido un tema tabú hablar de dolencias y necesidades de la mujer, sin embargo, la evidencia demuestra que es inminente dar lugar a la salud de género, entendiendo y respetando los diferentes ciclos de la mujer.
Desde la infancia, la mujer se expone a diferentes cambios corporales que van definiendo su salud, episodios como:
- La menarquía.
- El embarazo.
- La lactancia.
- La menopausia.
Además, pudiendo adquirir patologías como:
- Síndrome de ovario poliquístico.
- Endometriosis.
- Alteraciones tiroideas.
- Cáncer de mama.
- Cáncer de útero, entre otros.
Las terapias preventivas y de acompañamiento a cada una de estas posibles dolencias, son clave en la calidad de vida de las mujeres, que muchas veces, deben cumplir varios roles en su día a día, sin tener el tiempo suficiente para acatar sus enfermedades.
Es por esto y más, que el desbalance hormonal va desencadenando diferentes alteraciones, pudiendo repercutir en el peso, e incluso creando patologías digestivas, como síndrome de colon irritable, estreñimiento, reflujo e incluso hemorroides.
Debido a la composición corporal femenina, con tendencia a acumular más masa grasa, se estima que su aporte calórico debería ser menor al de los varones , exigiendo porciones más pequeñas, lo que muchas veces no se hace posible, creando alteraciones:
- En el peso.
- De piel (celulitis y estrías).
- Dolores musculares y articulares.
8 consejos para manejar de a poco esta situación:
1. Incluir alimentación natural: como frutas, verduras, cereales, legumbres y semillas, estos alimentos contienen nutrientes esenciales, y por ser naturales, son más amigables con el sistema digestivo.
2. Aumentar el consumo de fibra: los problemas de digestión son muy comunes en las mujeres. Le recomiendo incorporar colores a su alimentación, es clave para mejorar esta situación.
3. Hidratación: el consumo de líquidos sin gas y sin azúcar, como agua, infusiones, hierbas y mate, en temperatura ambiente o tibia, son una gran ayuda con la digestión y dolencias.
4. Reducir consumo de:alérgenos proinflamatorios, entre ellos el gluten, lácteos de vaca, así como el café, el té negro y el azúcar refinada, ayudará a evitar llegar a la noche con un abdomen completamente inflamado y adolorido.
5. Mantener horarios de alimentación:es una excelente opción cuando sufre de ansiedad; esto repercute en su relación con la comida.
6. Chequear los niveles de vitaminas y minerales: al menos una vez al año, con ayuda de un profesional de la salud, quien determinará algún tipo de suplementación si fuera necesario.
7. Libérese de los mitos: la fruta es igual a las 9 de la mañana y a las 9 de la noche, puede incluir el pan en su alimentación, y tomar su espumante favorito de vez en cuando.
8. Coma sin culpas: si se antojó, disfrútelo, ya habrá tiempo de ordenar y limpiar su alimentación. Si no escucha a su cuerpo, ese antojo no se irá.
En mi experiencia de consulta nutricional, siento que es necesario dar un enfoque distintivo a la terapia femenina. El 90% de mis pacientes ha tenido episodios de salud, los cuales repercutieron a partir de una mala relación con la alimentación, y probablemente usted también esté pasando por lo mismo.
Como mujer, mamá y profesional de la salud, me encantaría haber tenido mejor acompañamiento; pero afortunadamente, hoy en día es posible informarse y ayudarse, con diferentes profesionales de la salud, con el objetivo valioso de mejorar la calidad de vida.

Lic. Carla Caballero
Lic. en Nutrición
Matrícula Profesional N° 23